Ya mediados de Mayo, ese mes que para nosotros, los salesianos, es tan importante. Desde que empieza estamos planeando y preparando todo para las grandes fechas:
6 de mayo, nuestro Santo Alegre, Domingo Savio.
Don Bosco, con unas palabras marcará su vida: “Domingo, lo que Dios quiere de ti, como adolescente, es que cumplas siempre bien tus deberes de estudiante, trates de hacer el bien a tus compañeros y estés siempre alegre”. Y cosa maravillosa la alegría viene a definir esta santidad tan salesiana y juvenil: “Nosotros hacemos consistir la santidad en estar siempre alegres, haciendo bien las cosas que tenemos que hacer, porque Jesús lo quiere”.
El 12 celebramos la Vigilia de nuestra Fundadora Madre Mazzarello, con una preciosa presentación de Sor Encarnita y un sencillo ágape de todos los estamentos de la casa.
El 13 Gran fiesta de Maín.
colaboramos a la fiesta escolar con la venta de los bocadillos, refrescos y chucherías, en esta ocasión la recaudación irá a parar a las casa salesianas de Nepal damnificadas por el terremoto.
Y durante todo este tiempo preparativos sin cesar para nuestro gran momento nuestra procesión. Adorno de la fachada, Preparación de túnicas, traslado y limpieza de enseres, organización de procesión y por supuesto los ensayos.
Este año tres estrenos: las caídas del paso, el estandarte de Don Bosco en su bicentenario y la primera cuadrilla de cargadoras.
Ya todo preparado, mañana el gran día.
